Según Briana Shemroske, asistente editorial del departamento de literatura para jóvenes de Booklist, Harry Potter habría causado que los libros para niños sean más largos que antes. Esto no está relacionado con el número de niños que leen libros.
Brianna descubrió, tras una investigación, que los libros para niños se habían vuelto más largos a través del tiempo. Aquí una gráfica:
Esto indica que desde 1976, las páginas de los libros para niños ha crecido un 173%. Desde 1996, ha crecido en un enorme 111%. Esta fecha es significativa, porque un año después Harry Potter y la Piedra Filosofal salió a las estanterías, convirtiéndose en un verdadero fenómeno editorial. Millones de niños alrededor del mundo fueron cautivados por la historia.
Shemroske le preguntó a varios expertos si sabían a qué se debía que los libros infantiles fueran más largos que antes, y todos le dieron la misma respuesta: Harry Potter.
La editora Ilene Cooper mencionó que los libros de fantasía usualmente eran más largos de lo habitual. “Los libros de fantasía tienden a ser bastante largos. Los autores están construyendo otro mundo. Los lectores de fantasía quieren perderse en estos mundos”.